Tiffy Moore necesita un piso barato, y con urgencia. Leon Twomey trabaja de noche y anda escaso de dinero. Sus amigos piensan que están locos pero es la solución ideal: Leon usa la cama mientras Tiffy está en la oficina durante el día y ella dispone del apartamento el resto del tiempo. Y su modo de comunicarse mediante notas es divertido y parece funcionar de maravilla para resolver las vitales cuestiones de quién se ha acabado la mantequilla, cuántos cojines son demasiados y si la tapa del váter debería estar subida o bajada. Claro que si a eso se añaden exnovios obsesivos, clientes exigentes, hermanos encarcelados por error y, lo más importante, el hecho de que aún no se conocen, Tiffy y Leon están a punto de descubrir que lograr la convivencia perfecta no es fácil. Y que convertirse en amigos puede ser solo el principio...
Cuando estaba elaborando la entrada de novedades de junio del año pasado vi que este libro podría interesar a la gente, así que lo incluí en la entrada. A mí la verdad es que me dejó sin más. Pero entonces empezaron a surgir como champiñones opiniones súper positivas en la blogosfera y me dije: “¿Y si me estoy perdiendo algo muy guay? No es el género que más suelo leer, pero parece que está muuuy bien, así que…” Total, que le he dado una oportunidad y no puedo estar más de acuerdo con todas esas opiniones.
Me he enamorado por completo de esta historia, de Tiffy, de Leon y de sus notas. Es una de esas lecturas que, a lo que te das cuenta, estás con una sonrisilla tonta en los labios y que quieres continuar leyendo, pero a la vez no quieres que acabe de lo bonico que es todo.
En líneas generales la trama trata básicamente de lo que habla la sinopsis. El novio de Tiffy la ha dejado y ella tiene que buscar un apartamento en el que vivir. Leon necesita dinero, por lo que pone un anuncio en el que busca compañero de piso, bueno, y de cama aprovechando que él trabaja de noches, la otra persona puede disponer del apartamento cuando no está. De esta forma, Tiffy se convierte en su compañera de piso y entre ellos, al no poder coincidir nunca, empieza a surgir una extraña relación a través de notas que se van dejando por toda la casa.
Ya de por sí esta situación es un tanto rocambolesca, pero es que además Tiffy y sus ocurrencias hacen que este libro tenga bastante humor. Salvando las distancias, “Piso para dos” me ha recordado un poco en ese sentido a “Yo antes de ti”, así que si os gustó este, estoy casi segura que el libro del que os hablo también lo hará. Es cierto que en “Piso para dos” no hay tanta carga dramática, pero también tiene algún que otro conflicto que es muy importante a lo largo de la trama, como es el maltrato psicológico.
Volviendo a los personajes, como ya he dicho, me ha encantado conocer a los protagonistas de esta historia, los cuales están perfectamente definidos. Por un lado, Tiffy es una chica que a pesar de todo siempre ve el lado positivo de la vida y que con su carácter extrovertido y su extraña forma de combinar prendas hace que no pase desapercibida. Por otro, Leon es parco en palabras, bastante introvertido pero un buenazo, lo que hace que, pese a lo diferentes que son, él y Tiffy se lleven a las mil maravillas en los escasos metros cuadrados de su apartamento. En cuanto a los secundarios, estaría largo y tendido hablando de ellos, pero destriparía muchas cosas, así que sólo diré que todos aportan algo a esta historia y que también están muy bien perfilados.
En cuanto al estilo de la autora, me sorprende que sea su primera obra publicada porque, aunque no destaque por tener un estilo muy elaborado, aporta lo que este tipo de lectura pide, es decir, algo sencillo, fresco y con mucho humor que hace que las páginas se pasen volando. Además, me ha gustado ver que a lo largo de la historia se iban alternando los narradores entre Tiffy y Leon en primera persona y que, además, los diálogos en la parte de Tiffy eran como estamos acostumbrados, con los guiones, pero en los capítulos de Leon se usaba los diálogos como en una obra de teatro.
Por último, el final me ha dejado más que satisfecha, cerrando por completo todas las subtramas que se habían ido abriendo a lo largo de la historia y aportando un cierre totalmente a la altura de lo que ha sido el libro en general.
En definitiva, “Piso para dos” ha sido un libro que me ha sorprendido para bien, y que por su historia, su humor y sus personajes ha conseguido entretenerme, empatizar y disfrutar como hacía tiempo que un libro no lo conseguía. Todavía falta mucho año por delante, pero estoy segura de que va a ser una de mis mejores lecturas de este año.
Me he enamorado por completo de esta historia, de Tiffy, de Leon y de sus notas. Es una de esas lecturas que, a lo que te das cuenta, estás con una sonrisilla tonta en los labios y que quieres continuar leyendo, pero a la vez no quieres que acabe de lo bonico que es todo.
En líneas generales la trama trata básicamente de lo que habla la sinopsis. El novio de Tiffy la ha dejado y ella tiene que buscar un apartamento en el que vivir. Leon necesita dinero, por lo que pone un anuncio en el que busca compañero de piso, bueno, y de cama aprovechando que él trabaja de noches, la otra persona puede disponer del apartamento cuando no está. De esta forma, Tiffy se convierte en su compañera de piso y entre ellos, al no poder coincidir nunca, empieza a surgir una extraña relación a través de notas que se van dejando por toda la casa.
Ya de por sí esta situación es un tanto rocambolesca, pero es que además Tiffy y sus ocurrencias hacen que este libro tenga bastante humor. Salvando las distancias, “Piso para dos” me ha recordado un poco en ese sentido a “Yo antes de ti”, así que si os gustó este, estoy casi segura que el libro del que os hablo también lo hará. Es cierto que en “Piso para dos” no hay tanta carga dramática, pero también tiene algún que otro conflicto que es muy importante a lo largo de la trama, como es el maltrato psicológico.
Volviendo a los personajes, como ya he dicho, me ha encantado conocer a los protagonistas de esta historia, los cuales están perfectamente definidos. Por un lado, Tiffy es una chica que a pesar de todo siempre ve el lado positivo de la vida y que con su carácter extrovertido y su extraña forma de combinar prendas hace que no pase desapercibida. Por otro, Leon es parco en palabras, bastante introvertido pero un buenazo, lo que hace que, pese a lo diferentes que son, él y Tiffy se lleven a las mil maravillas en los escasos metros cuadrados de su apartamento. En cuanto a los secundarios, estaría largo y tendido hablando de ellos, pero destriparía muchas cosas, así que sólo diré que todos aportan algo a esta historia y que también están muy bien perfilados.
En cuanto al estilo de la autora, me sorprende que sea su primera obra publicada porque, aunque no destaque por tener un estilo muy elaborado, aporta lo que este tipo de lectura pide, es decir, algo sencillo, fresco y con mucho humor que hace que las páginas se pasen volando. Además, me ha gustado ver que a lo largo de la historia se iban alternando los narradores entre Tiffy y Leon en primera persona y que, además, los diálogos en la parte de Tiffy eran como estamos acostumbrados, con los guiones, pero en los capítulos de Leon se usaba los diálogos como en una obra de teatro.
Por último, el final me ha dejado más que satisfecha, cerrando por completo todas las subtramas que se habían ido abriendo a lo largo de la historia y aportando un cierre totalmente a la altura de lo que ha sido el libro en general.
En definitiva, “Piso para dos” ha sido un libro que me ha sorprendido para bien, y que por su historia, su humor y sus personajes ha conseguido entretenerme, empatizar y disfrutar como hacía tiempo que un libro no lo conseguía. Todavía falta mucho año por delante, pero estoy segura de que va a ser una de mis mejores lecturas de este año.
Lee un fragmento del libro aquí.
Además de "Piso para dos", Beth O'Leary ha publicado hasta la fecha otro libro bajo el título "The Switch", concretamente en abril de este año, por lo que de momento no hay noticias de que se vaya a publicar en español. También está planeado que en la primavera de 2021 publique su tercer libro "The Road Trip".
Además de "Piso para dos", Beth O'Leary ha publicado hasta la fecha otro libro bajo el título "The Switch", concretamente en abril de este año, por lo que de momento no hay noticias de que se vaya a publicar en español. También está planeado que en la primavera de 2021 publique su tercer libro "The Road Trip".
Cuando se le ordena a Leena Cotton tomar un año sabático de dos meses después de hacer una gran presentación en el trabajo, se escapa a la casa de su abuela Eileen para descansar un poco. Eileen está nuevamente soltera y a punto de cumplir los ochenta. Le gustaría tener una segunda oportunidad en el amor, pero su pequeño pueblo de Yorkshire no ofrece muchos caballeros elegibles.
Una vez que Leena se entera de la situación romántica de Eileen, propone una solución: un intercambio de dos meses. Eileen puede vivir en Londres y buscar el amor. Mientras tanto, Leena se ocupará de todo en la zona rural de Yorkshire. Pero con los cotilleos de los vecinos y la difícil dinámica familiar, y los modernos compañeros de piso de Londres y las citas en línea en la ciudad, ponerse en el lugar de la otra resulta más difícil de lo que cualquiera de las dos esperaba.
Leena se da cuenta de que una relación a larga distancia no es tan romántica como esperaba que fuera, y luego está la maestra escolar irritantemente perfecta, y distraídamente atractiva, que sigue apareciendo para superar sus esfuerzos para impresionar a los aldeanos locales. De vuelta en Londres, Eileen tiene un gran éxito con sus nuevos vecinos, pero ¿está su pareja perfecta más cerca de casa de lo que pensó?
Addie y su hermana están a punto de embarcarse en un viaje épico por carretera a la boda de una amiga en el norte de Escocia. La lista de reproducción está planeada y los bocadillos preparados.
Pero, poco después de partir, un automóvil choca contra la parte de atrás del de ellas. El conductor no es otro que el ex de Addie, Dylan, a quien ha evitado desde su ruptura traumática dos años antes.
Dylan y su mejor amigo también se dirigen a la boda, y su coche ha quedado destrozado, por lo que Addie no tiene más remedio que ofrecerse a llevarles en su coche. El automóvil pronto está repleto de equipaje y secretos, y con trescientas millas por delante, Dylan y Addie no pueden evitar confrontar la historia muy desordenada de su relación ...
¿Llegarán a la boda a tiempo? Y, lo que es más importante ... ¿es este realmente el final del camino para Addie y Dylan?
¡Nos leemos!
