Todo el mundo sabe que cualquier dragón que se precie puede aspirar a ser un buen político, profesor o matemático; no como esos absurdos humanos, que prestan tanta atención a sus emociones que acaban olvidando cómo pensar...
En un reino mágico y sombrío en el que humanos y dragones conviven con una paz inestable, Seraphina es una música joven y talentosa (pese a ser humana) que acaba de entrar en el coro de la corte. Allí, las intrigas políticas son el pan de cada día. Poco después de su llegada, una noticia atraviesa los muros de palacio: un miembro de la familia real ha sido asesinado. Inmediatamente, los cimientos de esa fachada de paz se resquebrajan.
Para investigar el crimen, Seraphina se alía con el perspicaz Lucian Kiggs, capitán de la guardia real. Pero todo el mundo tiene secretos, y ella no es una excepción: lo que oculta haría que la condenaran a muerte.
En una carrera a contrarreloj, Kiggs y Seraphina intentarán destramar una telaraña de mentiras, a cual más turbia, mientras ella hace todo lo posible para que las suyas no salgan a la luz.
En un reino mágico y sombrío en el que humanos y dragones conviven con una paz inestable, Seraphina es una música joven y talentosa (pese a ser humana) que acaba de entrar en el coro de la corte. Allí, las intrigas políticas son el pan de cada día. Poco después de su llegada, una noticia atraviesa los muros de palacio: un miembro de la familia real ha sido asesinado. Inmediatamente, los cimientos de esa fachada de paz se resquebrajan.
Para investigar el crimen, Seraphina se alía con el perspicaz Lucian Kiggs, capitán de la guardia real. Pero todo el mundo tiene secretos, y ella no es una excepción: lo que oculta haría que la condenaran a muerte.
En una carrera a contrarreloj, Kiggs y Seraphina intentarán destramar una telaraña de mentiras, a cual más turbia, mientras ella hace todo lo posible para que las suyas no salgan a la luz.
El hecho de saber que “Seraphina” se trataba de un libro de fantasía con dragones de por medio (por si no quedaba claro con esa preciosa portada) ya me daba en la nariz que me iba a gustar.
Aunque a decir verdad, al principio de la novela no las tuve todas conmigo ya que podría decirse que el libro se puede dividir en dos partes, donde la primera mitad es algo introductoria y densa (que no pesada, ojo) en la que se presenta ese increíble mundo que ha creado su autora que, inspirado en la Edad Media, nos muestra como es la convivencia entre los dragones transformados en humanos, llamados saar y los humanos propiamente dichos; además de mostrar una religión, filosofía y política creada para dicho mundo.
Como digo, en esa primera mitad apenas hay acción y hay algún que otro capítulo que no se comprende a dónde quiere ir a parar la autora relatándonos con todo lujo de detalles una especie de "sueños" algo caóticos de la protagonista, aunque luego se entenderá mejor qué finalidad tiene en la historia. En cuanto a la segunda mitad, nos encontramos con mucha más acción que en la primera parte, con todas esas intrigas palaciegas que me encantan, así como un desarrollo más amplio de los personajes, vamos que ha sido un no parar de leer.
Así pues, aunque en mi opinión la autora mantiene un ritmo adecuado durante todo el relato, sí que es verdad que en esa primera parte cuesta más meterse de lleno por lo que nos está contando que durante la otra parte, en la que como digo, hay una mayor cantidad de escenas de acción que aportan más dinamismo.
Hay muchas cosas que me han enamorado de esta novela y una de las que destacaría sería el estilo de la autora. En sí, no es un estilo complejo, pero utiliza un vocabulario muy rico, sobre todo de términos de indumentaria medieval, aperos de labranza, instrumentos musicales, etc, que me han hecho buscar más de una y de dos veces su significado en el diccionario (sí, no me di cuenta de que al final del libro hay un glosario con la mayor parte de esas palabras junto con el elenco de los personajes). No sabéis lo que me gusta que un libro me haga descubrir nuevas palabras, aunque eso signifique tener que parar de vez en cuando la lectura para buscarlas. Desconozco si este vocabulario tan amplio es cosa de la autora o sólo de la traductora, ya que no sé hasta qué punto tiene libertad para traducir una palabra y buscar un sinónimo u otro, en cualquier caso, me alegro de que el resultado sea así.
Otro de los aspectos que me han ganado ha sido esa ambientación medieval que ya he mencionado anteriormente. Me ha gustado mucho conocer Villa Lavonda con su catedral, su palacio, el barrio-guetto de Quigatera, etc, y las descripciones que les acompañan. Y, como ya he mencionado, me ha fascinado que la autora desarrollara de esa forma tan minuciosa la religión de dicho país, con sus creencias y dichos, las corrientes filosóficas, y todo lo referente a la música y la ciencia. No es que precisamente ame todo lo que tenga que ver con la filosofía y la teología, pero me ha encantado ver cómo ha creado la autora una ambientación tan compleja en este sentido.
Por otro lado, hay un número más que considerable de personajes (de ahí que sea tan útil mirar en las últimas páginas del libro y encontrarse el elenco de personajes) aunque están muy bien perfilados y no llega a ser demasiado lioso saber quién es quién, excepto al principio, cuando se presentan los personajes y no se tiene muy claro el parentesco de unos con otros y la jerarquía que los unen. Por suerte, a lo largo de la narración esas posibles dudas se van despejando.
Entre dichos personajes destaca Seraphina, la protagonista de esta historia y que será la que nos narre en primera persona lo que ocurrió. Ha sido un personaje que me ha gustado muchísimo por lo fuerte y valiente que es, aunque ella crea que no lo es tanto y, sobre todo, por esa capacidad de mentir y de soportar la carga tan pesada que lleva a sus espaldas con tal de que su secreto no salga a la luz. En cuanto a los secundarios destacaría al capitán de la guardia y príncipe bastardo, Lucian Kiggs, a la adorable segunda heredera del trono, Glisselda, el gruñón compositor de la corte, Viridius, la estirada lady Corongi, y por supuesto, Orma, el profesor y algo así como el tutor de Seraphina y que desde luego se ha convertido en uno de mis personajes favoritos.
Por último, pero no menos importante, esta maravillosa historia que va in crescendo conforme pasan las páginas, haciendo que sea imposible soltarlo, tiene un final apoteósico, de esos en los que te mueres de intriga por saber qué va a pasar en el siguiente libro.
Aunque a decir verdad, al principio de la novela no las tuve todas conmigo ya que podría decirse que el libro se puede dividir en dos partes, donde la primera mitad es algo introductoria y densa (que no pesada, ojo) en la que se presenta ese increíble mundo que ha creado su autora que, inspirado en la Edad Media, nos muestra como es la convivencia entre los dragones transformados en humanos, llamados saar y los humanos propiamente dichos; además de mostrar una religión, filosofía y política creada para dicho mundo.
Como digo, en esa primera mitad apenas hay acción y hay algún que otro capítulo que no se comprende a dónde quiere ir a parar la autora relatándonos con todo lujo de detalles una especie de "sueños" algo caóticos de la protagonista, aunque luego se entenderá mejor qué finalidad tiene en la historia. En cuanto a la segunda mitad, nos encontramos con mucha más acción que en la primera parte, con todas esas intrigas palaciegas que me encantan, así como un desarrollo más amplio de los personajes, vamos que ha sido un no parar de leer.
Así pues, aunque en mi opinión la autora mantiene un ritmo adecuado durante todo el relato, sí que es verdad que en esa primera parte cuesta más meterse de lleno por lo que nos está contando que durante la otra parte, en la que como digo, hay una mayor cantidad de escenas de acción que aportan más dinamismo.
Hay muchas cosas que me han enamorado de esta novela y una de las que destacaría sería el estilo de la autora. En sí, no es un estilo complejo, pero utiliza un vocabulario muy rico, sobre todo de términos de indumentaria medieval, aperos de labranza, instrumentos musicales, etc, que me han hecho buscar más de una y de dos veces su significado en el diccionario (sí, no me di cuenta de que al final del libro hay un glosario con la mayor parte de esas palabras junto con el elenco de los personajes). No sabéis lo que me gusta que un libro me haga descubrir nuevas palabras, aunque eso signifique tener que parar de vez en cuando la lectura para buscarlas. Desconozco si este vocabulario tan amplio es cosa de la autora o sólo de la traductora, ya que no sé hasta qué punto tiene libertad para traducir una palabra y buscar un sinónimo u otro, en cualquier caso, me alegro de que el resultado sea así.
Otro de los aspectos que me han ganado ha sido esa ambientación medieval que ya he mencionado anteriormente. Me ha gustado mucho conocer Villa Lavonda con su catedral, su palacio, el barrio-guetto de Quigatera, etc, y las descripciones que les acompañan. Y, como ya he mencionado, me ha fascinado que la autora desarrollara de esa forma tan minuciosa la religión de dicho país, con sus creencias y dichos, las corrientes filosóficas, y todo lo referente a la música y la ciencia. No es que precisamente ame todo lo que tenga que ver con la filosofía y la teología, pero me ha encantado ver cómo ha creado la autora una ambientación tan compleja en este sentido.
Por otro lado, hay un número más que considerable de personajes (de ahí que sea tan útil mirar en las últimas páginas del libro y encontrarse el elenco de personajes) aunque están muy bien perfilados y no llega a ser demasiado lioso saber quién es quién, excepto al principio, cuando se presentan los personajes y no se tiene muy claro el parentesco de unos con otros y la jerarquía que los unen. Por suerte, a lo largo de la narración esas posibles dudas se van despejando.
Entre dichos personajes destaca Seraphina, la protagonista de esta historia y que será la que nos narre en primera persona lo que ocurrió. Ha sido un personaje que me ha gustado muchísimo por lo fuerte y valiente que es, aunque ella crea que no lo es tanto y, sobre todo, por esa capacidad de mentir y de soportar la carga tan pesada que lleva a sus espaldas con tal de que su secreto no salga a la luz. En cuanto a los secundarios destacaría al capitán de la guardia y príncipe bastardo, Lucian Kiggs, a la adorable segunda heredera del trono, Glisselda, el gruñón compositor de la corte, Viridius, la estirada lady Corongi, y por supuesto, Orma, el profesor y algo así como el tutor de Seraphina y que desde luego se ha convertido en uno de mis personajes favoritos.
Por último, pero no menos importante, esta maravillosa historia que va in crescendo conforme pasan las páginas, haciendo que sea imposible soltarlo, tiene un final apoteósico, de esos en los que te mueres de intriga por saber qué va a pasar en el siguiente libro.
Lo mejor: ¡Todo! Desde la maravillosa historia, a la construcción del mundo y su ambientación, pasando por una protagonista genial, así como unos secundarios muy bien definidos (sobre todo Orma), un estilo impecable y un final que deja con ganas de más.
Lo peor: el principio es algo caótico y un pelín lento.
Primeros capítulos (aquí).
Página web de la autora (aquí).
Seraphina es la primera parte de una bilogía. El segundo libro ya está disponible en español bajo el título de "Escamas".
El oscuro secreto que Seraphina llevaba años ocultando por fin ha salido a la luz. Sin embargo, ahora hay otro asunto mucho más importante: la guerra que acaba de estallar.
Para inclinar la balanza a su favor, la reina Glisselda y el príncipe Lucian le encomiendan a Seraphina que salga del reino de Goredd y recorra las Tierras del Sur en busca de otros que comparten su mismo secreto. Lo que no saben es que no todos desean lo mismo y encontrar a algunos podría resultar letal.
Actualmente, Rachel Hartman está escribiendo una nueva bilogía ambientada en el mismo mundo que el de Seraphina. Hace un tiempo se oyeron rumores de que, al menos la primera parte tendría como protagonista a una de las hermanastras de la propia Seraphina.
¡Nos leemos!
Hola^^
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado tanto, yo lo tengo pendiente de leer y espero ponerme pronto con el pues pinta muy bien y, por lo que he ido leyendo en diferentes reseñas, creo que será una lectura muy grata.
un besote!!
Cada vez me llaman más estos libros y espero poder leerlos algún día. Un besote :)
ResponderEliminar¡Hola! Te habías pasado por mi blog y me he animado a pasarme por el tuyo. ¡Lo tienes muy bonito! :D Por aquí me quedo,
ResponderEliminarUn besooote ^^
¡Hola! ^^
ResponderEliminarYo también tuve la intuición de que me iba a gustar este libro. Sobre todo al ver la portada y conocer su argumento, pero no podía estar equivocada. No pude pasar del comienzo, porque como bien dices, es muy denso, pesado (para mi si), y sobre todo confuso. Es que no me enteraba de nada, no me enganchaba la historia, y si a eso le sumamos la poca paciencia que tengo yo con los libros, lo terminé abandonando.
Besos!
¡Hola! No sé porque no me animo a leer este libro.
ResponderEliminarNo es uno de ellos que me llame la atención, y tal vez, además,
sea por que tengo una lista demasiada extensa de libros por leer xDD
Nos leemos<3
Justo lo acabé ayer y OMG ganas de empezar Escamas a la de ¡ya! Sin duda el principio caótico es muy frustrante pero luego va mejorando muy mucho y es maravilloso ^-^
ResponderEliminar¡SE MUUUUUUUUUUUY FELIIIIIIIIIIIZ! :):)
Hola!
ResponderEliminarA mí también me gustó muchísimo! Lo leí el año pasado y aunque me costó al principio, como a ti, me pareció algo lioso y un poco denso, en cuanto me situé, no pude dejar de leer.
Me encantó el mundo que ha creado la autora, es muy interesante y original. Y todo el misterio que hay, Seraphina que es genial... en fin, que me encantó.
Besos!